jueves, 16 de noviembre de 2017

Las Fundaciones de Guadalajara

En el mes de Octubre de 1532, Nuño Beltrán de Guzmán –conocido por cruel y sanguinario- comisiona a Juan de Oñate para que funde, en Nochistlan, la ciudad de Guadalajara, se le llamo así porque en España el vivía en un lugar llamado de la misma manera. No obstante, por las condiciones geográficas, un año más tarde, en 1533, se ordena el Traslado de Guadalajara a Tonalá. Durante 1534, Guadalajara se funda por tercera ocasión, ahora en Tlacotan, en esta ocasión, se caracterizo por el enfrentamiento constante entre los indígenas y los españoles encabezados por el virrey Antonio de Mendoza. Ya para Julio 30, de 1538, Nuño Beltrán de Guzmán fue enviado a España, donde paso sus últimos años. El 14 de  1542, se funda por cuarta y última ocasión la ciudad de Guadalajara, en el Valle de Atemajac. La palabra Guadalajara viene del árabe: Oued-el-j’ra  que significa “Rio que va entre piedras” o, “Rio Pedroso”.

Ubicaciones de las cuatro fundaciones de Gudalajara
Centro Histórico de Guadalajara

Guadalajara, es conocida hoy en día, en toda la República mexicana como una de las ciudades más hermosas y turísticas de todas. En esta hermosa ciudad hay decenas de lugares con toda una historia detrás de sus muros, al estilo barroco. Algunas de las construcciones más importantes de Guadalajara, se encuentran en la zona centro de la misma, tales como:

·         -Catedral de Guadalajara.
·         -Museo Regional.
·         -Plaza de la Liberación.
·         -Plaza Tapatía.
·         -Plaza de Armas.
·         -Plaza de los Mariachis.
·         -Plaza fundadores.
·         -La rotonda de los jaliscienses.
·         -Hospicio Cabañas.
·         -Fuente de los niños miones.
·         -Palacio de Gobierno.


A continuación se muestra de forma más detallada de estas hermosas construcciones que hacen de Guadalajara una ciudad única.

Catedral de Guadalajara


HISTORIA…
La primera catedral fue construida en 1541 en lo que hoy es el templo de santa María de Gracia. Para alzar esta iglesia se utilizaron originalmente adobe y techos de paja.
El 18 de mayo de 1555 se obtuvo autorización por cédula real para edificar la iglesia catedral, cuyo costo sería cubierto por la Real Hacienda, los encomenderos y comunidad indígena (disposición que no se cumplió del todo); así que para el 31 de julio de 1561, fray Pedro de Ayala, a la sazón el segundo obispo de Nueva Galicia, colocó y bendijo la primera piedra de este bello templo. A la ceremonia de colocación asistieron los cabildos eclesiástico y civil, la Real Audiencia y los nobles de la ciudad. Hasta el 30 de mayo de 1574 todo había transcurrido con normalidad, sin embargo, mientras se celebraba una misa, unos vecinos lanzaron cohetones al aire en el corral contiguo y des afortunadamente algunos cayeron en la iglesia, que se incendió y quedó semiderruida.
Por cédula real se obtuvo el dinero para la nueva catedral. La obra avanzó muy despacio, pues escaseaban los fondos. Hacia febrero de 1618, el maestro arquitecto Martín Casillas había llevado los trabajos a su término. Así, en abril del mismo año se trasladaba el Santísimo Sacramento, de la antigua iglesia, a la nueva.
En el año de 1818, un fuerte terremoto sacudió la ciudad, cuyas secuelas dejaron una nueva tragedia: las torres y la cúpula se habían derrumbado. Fueron sustituidas por unas nuevas, que también colapsarían durante un posterior sismo, en el año de 1849. Las nuevas torres fueron construidas por el ingeniero arquitecto Manuel Gómez Ibarra, costaron 33 521 pesos, más 7166 pesos en honorarios para el arquitecto.1​ Se demoró tres años en terminarlas, hacia 1854.
Dirección: Avenida Alcalde 10, Zona Centro, 44100 Guadalajara, Jalisco
Torre: Dos (65.91 y 65.55 metros de altura)
Estilos arquitectónicos: Arquitectura del Renacimiento, Arquitectura neo gótica
Arquitectos: Martín Casillas, Manuel Gómez Ibarra



Callejón Del Diablo




El  convento de Santa María de Gracia abarcaba por el oriente hasta el río San Juan de Dios (hoy Calzada Independencia), por el norte hasta la calle Juan Manuel, por el poniente hasta Belén y por el sur hasta cruzar por Hidalgo, en una de sus largas paredes, chocaba un angosto callejón tétrico y obscuro, llamado del "Ahorcado", se le conocía por ese nombre por que ahí se colgó a un adúltero de apellido Lemus. En la época virreinal este callejón era visto con horror por todos los habitantes de Guadalajara. Al tiempo se le comenzó a llamar como "Rincón del Diablo" por un suceso muy comentado que pasó ahí. En una noche, se despertó alarmada la religiosa encargada de las novicias a causa de los gritos y las ofensas  que se escapaban de aquel antro de tinieblas. Como en ese momento la esquila capuchina tocaba a maitines, a las doce de la noche, la maestra del noviciado no pudo darse  cuenta de la tragedia que se desenvolvía en el ya repetido callejón: mas habiendo cesado la esquila de llamar a las religiosas, mediante una silla pudo, la religiosa, asomarse por la arpillera, bajándose violentamente, horrorizada al ver que frente a la puerta de la casucha que ocupaba el rincón, había una larga mesa con paño de tumba, donde cuatro velas negras sostenidas en cráneos humanos, alumbraban a varias mujeres desmelenadas, que apurando en copas un brebaje misterioso, azotaban con recias disciplinas a un Santo Cristo de Marfil, que tendido sobre aquella triste y sacrílega mesa, parecía que con sus inconmovibles miradas suplicaba gracia y favor de aquellas brujas. 


No pudiendo contenerse la religiosa, llamó a la abadesa, que alarmada y a pesar de sus años trepó sobre la silla y al darse cuenta del sacrilegio no esperó a que amaneciera, sino que a esas horas mandó llamar al mayordomo del Convento, un respetable sacerdote, el que apenas amaneció dio noticias al Obispo de Guadalajara de lo acontecido. 
El Sr. Alcalde, Obispo de la Diócesis, mandó llamar a los oficiales del Santo Oficio para enterarlos de lo acaecido. El tribunal de la Inquisición se trasladó desde ese día a un lugar inmediato al "Rincón del Diablo" para sorprender aquellos bichos que a tan judía ceremonia se entregaban. La ocasión se les presentó allí a poco, porque la siguiente noche observaron los oficiales del Santo Oficio que varios bultos envueltos en luengos y negros mantos y encapuchados se deslizaban, arrastrándose, por el callejón, introduciéndose cautelosamente en el lugar frente al cual había colocada la funeraria misa. 
Ellos, con las mismas precauciones, llegaron a la puerta de la casucha que, albergaba aquellos malvados, aplicando el ojo por la rendija de la llave, descubrieron que varios caballeros de los principales de la ciudad y algunas mujeres hermosas se entregaban a darle culto al Diablo. No pudiéndose contener y a los gritos de "Dense al Rey", "¡paso a la Inquisición!" empujaron la centenaria puerta, que cayó hecha astillas, y desenvainando apresuradamente sus tizonas, se trabó un rudo combate entre los brujos y los inquisitoriales, quedando la victoria de parte de éstos.

El Santo Tribunal descubrió que los tertulianos a aquella macabra fiesta adoraban al Diablo en una rica pintura que adornada con varias joyas, ocupaba el lugar de honor en su largo y artístico salón todo él adornado con ricos cortinajes de Damasco y que servía para sus orgías, las viandas y licores que había en grandes mesas, que podían compararse con los de la Corte de Nerón o Caracalla.
Llevados a la prisión inquisitorial y juzgados benignamente a los delincuentes aquí terminó este hecho que alarmó a la religiosa de la ciudad de Guadalajara". Contaban los viejos que al oír "El Rincón del Diablo", se persignaban y, decían: "Bendito y alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar", siempre evitaban pasar por ese lugar y cuando tenían que pasar por ahí, se acompañaban de alguna "santa reliquia o provistos de una redomita de agua bendita". 


Museo Regional de Guadalajara



 En la visita al museo regional de Guadalajara con mis compañeros vimos diferentes cosas y aprendimos un poco más de historia en nuestra excursión a través de este museo vimos diferentes antigüedades y pinturas incluso algunas artesanías.










Algunas otras de las cosas que vimos en ese lugar fueron:


 -Tumba de tiro: Era en la tierra un pozo de sección circular o rectangular ya cuando el pozo estaba a la profundidad que querían a un lado hacían la cámara funeraria donde iría el muerto y sus ofrenda en la tumbas se les ponen figurillas, frutas, herramientas y otros objetos para recrear un ambiente social y natura.



































- Figurillas: de la cultura chupicuaro se distingue por sus ojos alargados diagonalmente la figura de mujeres desnudas predomina.






Y lo que a mi parecer fue lo más interesante del museo es el mamut. Mamut de Catarina: fue descubierto en 1962 en el poblado de santa cantarina tiene una estructura interna de aceró quemantiene de pie al mamut y pegado al piso, los colmillos que el mamut tiene puestos no son de verdad ya que lis verdaderos pesaban mucho y podrían hacer que se callera le pusieron unos más ligeros dejando los originales a pie del mamut.

Foto tomada por la vigilante del salón arqueológico



Plaza de la Liberación

Nuestro equipo de trabajo investigo también la Plaza de Armas en la cual también se encuentra el monumento de “Guadalajara Guadalajara” donde miles de visitantes se posan para tomarse una foto sobre él.
Foto tomada por un visitante a nuestro grupo de trabajo
También conocida como Plaza de los Tres Poderes y popularmente como la Plaza de las "Dos Copas", ubicada entre las calles Hidalgo, Morelos, Liceo y Belén. Esta Plaza está rodeada por la catedral, un costado del Museo Regional, el Palacio Legislativo, el Teatro Degollado y un costado del Palacio de Gobierno. Construida en terrenos donde hace más de cuatro siglos y medio, se ponía un "tianguis" de "toda la comarca de indios, de cinco en cinco días, en el cual venden cosas de ropa menuda y otras cosillas que cada uno hace de su arte, y cosas de su bastimento, aves y legumbres".

En un plano de 1774, muestra una hermosa construcción a espaldas de Catedral en la esquina suroeste de la actual plaza, con el titulo de: "Casas del Cabildo y Ayuntamiento de esta ciudad de Guadalajara, capital del reino de la Nueva Galicia en América Septentrional que hoy sirve de palacio y habitación al muy honorable Sr. José de Burgos, Caballero de la orden de Santiago del consejo de S.M., coronel de sus reales ejércitos, gobernadores y capitán general del reino de la Nueva Galicia y presidente de la real audiencia y cancillería del reino". Era una gran casa de dos pisos, con su puerta principal viendo al Palacio de Gobierno, era mejor conocido este edificio como "Casa señorial de los Balbuena".

El tiempo siguió su recorrido y el gobernador Jesús González Gallo invitó al arquitecto Ignacio Díaz Morales para que elaborara y proyectara lo que fue su mayor obra, la gran cruz de plazas, a los cuatro flancos de la catedral. El brazo más largo de esta cruz latina lo conforma la Plaza de la Liberación, la cual está enmarcada por los edificios más representativos de la ciudad.

Esta gran rectángulo tiene varios prados y árboles de tabachín de varios colores, en su lado norte se encuentra una estatua de bronce de don Miguel Hidalgo y Costilla, lugar muy socorrido por los tapatíos para bolear sus zapatos, pero lo más representativo de esta plaza son sus dos enormes fuentes, construidas entre 1948 y 1952, diseñadas y creadas por Ignacio Díaz Morales. Tiene muchas bancas metálicas, así como numerosas farolas que la alumbran, bajo esta plaza se encuentra un amplio estacionamiento y pasa parte del túnel de la avenida Hidalgo.

Plaza Tapatía

Esta plaza es una bella zona turística de 70 mil metros cuadrados que incluye a su vez varias plazas como lo son: los Fundadores y Degollado, además de la denominada Explanada Central y el Paseo del Hospicio, también cuenta con dos andadores, uno atrás del Degollado y el otro a uno de sus costados, sobre la calle Morelos.


Esta obra se ideó para que los tapatíos y visitantes pudieran caminar por el Centro Histórico y admirar su arquitectura; en la parte central hay una gran fuente con el monumento de la Inmolación de Quetzalcoatl en el que a su alrededor encontrarás joyerías y comercios. En el andar verás la fuente de los Niños Meones y más espacios para tomar fotografías, recrearte y descansar.

Plaza de armas de Guadalajara

Esta plaza ha sido testigo de la evolución de Guadalajara desde su nacimiento. También se le conoce como la Plaza Mayor. Desde el siglo XIX, la plaza ha sido un importante lugar de esparcimiento para los locales. Pasea por esta gran plaza y disfruta de su ambiente tranquilo. Lleva a tu familia a conocer los atractivos que hay en esta zona y convive con los habitantes de Guadalajara.

En la noche podrás disfrutar del entorno iluminado de esta plaza histórica. Contempla el ambiente relajado de la plaza y pasea por sus áreas cercanas. Visita alguno de los restaurantes y bares que hay en los alrededores, o compra alguno de los antojitos que venden en la plaza. Varias agrupaciones musicales se presentan en la Plaza de Armas, las noches del martes, jueves y domingo.

   En el centro de la plaza se encuentra un kiosco de estilo francés. Se compró por orden del presidente Porfirio Díaz, en 1910, para conmemorar el centenario de la Independencia Mexicana. Sus pilares están adornados con pequeñas estatuas de figuras femeninas, cada una representando a un instrumento musical. En los alrededores de la plaza encontrarás algunas figuras griegas, que representan las cuatro estaciones.
   
 La plaza está ubicada en el corazón del centro histórico de Guadalajara, junto a varias de las principales atracciones de la ciudad. Entre ellas, destaca la Catedral de Guadalajara. Admira su fachada gótica, explora su interior y conoce su historia trágica, con diversos incendios y terremotos que la dañaron y obligaron a reconstruirla en numerosas ocasiones. Te recomendamos utilizar el transporte público para visitar esta zona, ya que es difícil encontrar lugar para estacionarte. Puedes llegar en el tren ligero, bajando en la estación de Plaza Universidad.

Si deseas visitarla la encuentras en esta ubicación:
Dirección: Avenida 16 de septiembre s/n, Zona Centro, 44100 Guadalajara, Jal.






Plaza Fundadores


Escultura de Bronce que conmemora a los fundadores de la ciudad de Guadalajara,
es una obra de Rafael Zamapirra

Técnicamente llamado Friso de los Fundadores de Guadalajara, se encuentra ubicado a espaldas del Teatro Degollado en la calle que cruza con la Plaza Tapatía y está formado por un grupo escultórico que conmemora el sitio del establecimiento definitivo de Guadalajara. Consiste en un mural de tres metros de altura por 21 metros de largo, realizado en altos relieves forjados en bronce que representan a los personajes fundadores de la ciudad (Cristóbal de Oñate, doña Beatriz Hernández y los grupos de españoles que ayudaron a la colonización: andaluces, castellanos y vizcaínos).

Estos hechos ocurrieron el 14 de febrero de 1542, siendo el cuarto y definitivo sitio donde se estableció la ciudad. Esta escultura es obra del jalisciense Rafael Zamarripa. Al lado sur de esta plaza se encuentran dos esculturas en bronce de Beatriz Hernández, valiente mujer que decidió el sitio de la fundación y Miguel de Ibarra, primer alcalde de la ciudad. En la actualidad, sirve de escenario para la presentación de diferentes actividades artísticas. 

La Rotonda de los Jalisciences Ilustres

La Rotonda de los Jaliscienses Ilustres es un monumento de la ciudad de Guadalajara, Jalisco, México, ubicado en la cuadra flanqueada por las avenidas Fray Antonio Alcalde, Miguel Hidalgo y las calles Liceo e Independencia, en el corazón de la capital del estado de Jalisco conocido como centro histórico, a un costado de la Catedral de Guadalajara. Rinde homenaje a la memoria de los jaliscienses que han trascendido a través de la historia. Muestra el respeto hacia estos grandes Jaliscienses.


 El monumento construido en el año de 1952, por el arquitecto Vicente Mendiola, consta de diecisiete columnas estriadas sin base ni capital y que sostienen un anillo de cantera que tiene grabado en uno de sus lados la leyenda "Jalisco a sus hijos esclarecidos"; en el centro del monumento existe un pebetero, además en la rotonda, hay noventa y ocho nichos para albergar los cuerpos de los hombres y mujeres más ilustres y a su alrededor también existen veintidós estatuas de preclaros jaliscienses.


En un principio fue nombrada como la "Rotonda de los Hombres Ilustres", puesto que sólo albergaba los restos de varones hasta la incursión de Irene Robledo y Rita Pérez Jiménez, a lo cual cambio su nombre por el actual "Rotonda de los Jaliscienses Ilustres". Para su construcción, tuvo que ser demolida una oficina de Correos y el Templo de la Soledad, proyectándose como un edificio que remataría en forma de cúpula y con un mural de José Clemente Orozco que se ubicaría en un tipo de domo, pero lamentablemente el proyecto nunca se terminó debido a que este falleció antes de que se pudiera iniciar.

El monumento contiene un total de 98 urnas para albergar los restos de personajes destacados en el arte, literatura, ciencia y en labores de mejoramiento de la ciudad.


Algunos de los laureados con tal honor son.

·         Luis Barragán Morfín
·         José Clemente Orozco
·         Agustín de la Rosa
·         Enrique Díaz de León
·         Manuel M. Diéguez
·         Gabriel Flores García
·         Jacobo Gálvez
·         Marcelino García Barragán
·         Valentín Gómez Farías
·         Efraín González Luna
·         Rafael Preciado Hernández
·         Enrique González Martínez
·         Heliodoro Hernández Loza
·         Manuel López Cotilla
·         Agustin de la Rosa
·         Pedro Moreno
·         Leonardo Oliva
·         Mariano Otero
·         Ramón Corona
·         Rita Pérez Jiménez
·         Luis Pérez Verdía
·         Alfredo R. Placencia
·         Irene Robledo G.
·         Francisco Rojas González
·         Francisco Silva Romero
·         Gerardo Suárez
·         Ignacio L. Vallarta
·         Agustín Yáñez
·         José Guadalupe Zuno
·         Jorge Matute Remus
·         Juan José Arreola Zuñiga
·         Guillermo Chávez Vega


Hospicio Cabañas


Otro lugar que visitamos fue el hospicio cabañas donde en grupo vimos cada una de las habitaciones, las cuales fueron remodeladas para ser utilizadas como salas de exposición con cuadros y murales que expresa el significado de aquel lugar.

El principal artífice de este hospicio, nombrado en sus inicios "Casa de Caridad y Misericordia", fue el obispo Juan Cruz Ruiz de Cabañas y Crespo, quien llega de España a la capital de la Nueva Galicia en 1796, con fin de ocupar el lugar dejado por fray Antonio Alcalde tras su fallecimiento. Si bien el proyecto original del obispo fue crear una casa de expósitos, el rey Carlos IV ordenó —a través de la Cédula expedida en San Ildefonso el 5 de septiembre de 1803— la ampliación de la finalidad del organismo y que se admitieran ancianos de ambos sexos, lisiados, enfermos habituales, huérfanos y caminantes pobres, así como que diera educación y corrección a menores.
Murales:


Entre 1937 y 1939, José Clemente Orozco realizaría –por encargo y con el apoyo del gobernador de Jalisco en aquellos años, Everardo Topete– 57 murales en lo que en su momento fuera el Hospicio Cabañas, inmueble que es un gran ejemplo de la arquitectura neoclásica en México, obra de Manuel Tolsá en la ciudad de Guadalajara. El edificio fue declarado Patrimonio de la Humanidad en 1997.


-Arquitectura

“El conjunto arquitectónico es único en su género porque, a diferencia de los centros análogos de su época, presenta una serie de elementos absolutamente originales, especialmente concebidos para satisfacer las necesidades de los asilados.

Son especialmente notables la sencillez de su trazado y sus dimensiones, así como la armonía lograda entre los edificios y los espacios al aire libre.”

Palacio de Gobierno

Su construcción comenzó en 1774  estuvo a cargo del arquitecto Vicente Mendiola y el ingeniero Marcelino Rodríguez Orozco.. Contempla los estupendos murales del reconocido artista mexicano, José Clemente Orozco. En lo alto de la escalera principal, verás el famoso retrato del libertador de México, Miguel Hidalgo. Fue en este Palacio de Gobierno donde Hidalgo emitió su decreto para abolir la esclavitud, en 1810. El famoso mural muestra a Miguel Hidalgo sosteniendo una antorcha contra las fuerzas oscuras. También podrás ver algunos de los bocetos originales de Orozco.


Aparte de ser una de las, más bellas fachadas de la República, en este inmueble se han desarrollado algunos de los acontecimientos históricos más importantes; desde la época virreynal, de este edificio partieron las determinaciones absolutas, personales, imperiosas de los gobernadores de la Audiencia y de los capitanes generales. En 1810, Miguel Hidalgo hizo su célebre Abolición de la Esclavitud; en 1855 se firmó el documento donde Jalisco se adhiere al Plan de Ayutla; el 14 de marzo de 1858 estuvo a un pelo de ser asesinado Benito Juárez; en 1859 se incendió una gran cantidad del parque de las armas que estaban depositadas en los almacenes del Palacio, volando casi todo el interior del edificio; el 30 de enero de 1915, Jesús Medina le metió un tiro a la carátula del reloj, el cual todavía se nota.
Fotos capturados por nuestro equipo de trabajo, collage realizado por Fernanda Correa

Fuente de los Niños Miones


Esta fuente representa la alegría de la infancia y es una de las muchas obras del escultor Miguel Miramontes y forma parte de la plaza Tapatía; Las cuatro estatuas de los niños jugando con el agua están rodeadas por herrería negra tradicional y fueron colocadas en  1982.

La fuente tiene la forma de un rectángulo, en el que en cada una de sus esquinas cuenta con un “niño mión” tallado en bronce, cada uno en posición diferente.


Estos niños se encuentran jugando con el agua, de ahí proviene el nombre y lo que significa: “Esta fuente que representa la alegría de la infancia… forma parte de la plaza tapatía; las cuatro estatuas de los niños jugando con el agua están rodeadas con herrería negra tradicional y fueron colocadas en 1982, junto con la plaza”, se lee en una leyenda colocada por el ayuntamiento.

Pese a que su historia es un tanto sencilla, han surgido diversos mitos alrededor de estos traviesos: Hay quienes cuentan que en realidad se trata de una leyenda, pues al estar cerca del Hospicio Cabañas –que hace unos años sí albergaba a niños-, hubo cuatro niños que se escaparon del hospicio para ir a jugar al río San Juan de Dios -cuando aún era río- que se encuentra a unas cuadras del lugar. Otro mito asegura que originalmente los cuatro niños se encontraban “haciendo pipí”, pero debido a que insultaba la moral de algunos, se optó por modificar las esculturas. 




Ven, conoce y visita Guadalajara!

Como te pudiste ya dar cuenta, Guadalajara es una ciudad hermosa y llena de historia, cada una de sus maravillosas construcciones te llena de asombro y sobre todo la historia que cada una de estas tiene para contarte te deja pasmado, tal es el caso de la Catedral, que en cada una de sus imágenes, obras y monumentos que en ella se encuentran, hay una historia que aunque distintas, no dejan de ser impresionantes; como la imagen del “anima sola” que gracias a esta se han salvado vidas y ha ayudado a miles de personas que acuden a ella, el Cristo de caña de maíz, mejor conocido como “El señor de las Aguas” ya que se le encontró flotando en un rio, o la niña que ahí reside, mejor conocida como “Santa Inocencia”, no cabe duda que la historia de esta dulce niña es una de las más hermosas que esta construcción tiene para contarnos. Otra construcción que nos impresiona es la Rotonda de los Jaliscienses Ilustres, que fue planeada y construida hace mas de 50 años, que aunque en un principio estaba solo destinada para los varones Jaliscienses y su nombre era: Rotonda de los hombres ilustres, cambio su nombre en el año 2000 para agregar a uno de sus michos a la maestra Irene Obledo Gracia, la primera mujer en estar aquí. Como veras la historia de Jalisco es hermosa, no te quedes con solo esta información, mejor ven y conócela y asómbrate tu mismo. 

Equipo de trabajo. Sobre la Plaza Iberoamericana.